Nuestro refugio se sitúa en unos amplios terrenos de 20.000 m² cedidos por el Ayuntamiento de Jerez de la Frontera. Este espacio está dividido en tres patios conectados entre sí a través de pasos seguros para que nuestros perros no se mezclen al cruzar de uno a otro.
Todos los patios disponen de tomas de agua, canaletas para el agua sucia y zonas de lavadero en las que limpiamos las mantas y sábanas. Además, cuentan piscinas que llenamos a diario en verano. ¡A nuestros amigos les encanta chapotear en ellas!
Unas instalaciones funcionales y bien cuidadas
Aunque no disponemos de electricidad, contamos con placas solares gracias a las cuales podemos tener un frigorífico para conservar determinados medicamentos y el pienso húmedo. También tenemos varias luces solares por la protectora que se encienden cuando detectan movimiento.
Los patios cuentan con un total de 39 cheniles que constan de dos zonas, una interior y otra exterior en la que colocamos toldos y una piscina en los meses más calurosos para que nuestros animales estén fresquitos. Cada uno de los cheniles está dotado de camas y/o casetas, comederos y bebederos. Estas instalaciones son limpiadas y desinfectadas diariamente mínimo una vez.
Ponemos mimo en el detalle
Cada patio dispone de amplias zonas de recreo para que nuestros inquilinos tengan espacio suficiente para esparcimiento, ejercicio físico y socialización. En cada uno de ellos se elabora un plan de salidas para poder sacar juntos a aquellos que se llevan bien. Cuando llega un nuevo perro, se prueba progresivamente con el resto de peludos para evaluar su carácter y que se vaya acostumbrando a los demás. Esto nos permite saber con quién se lleva mejor o con quién podría congeniar y, de esta forma, poder ubicarlo en uno de los tres patios según sus necesidades y sociabilidad y, si procede, agruparlos en los cheniles.
Contamos con un almacén donde guardamos los piensos, las mantas, las medicinas y todas las donaciones que nos van llegando, así como un amplio armario exterior donde almacenamos los productos de limpieza. Además, tenemos un jardín olfativo con plantas aromáticas como hierbabuena, romero, manzanilla o lavanda para que nuestros perretes puedan jugar desarrollando su olfato y estimular así su mente.
Siempre hay trabajo que hacer en un espacio tan grande y con más de 80 perros viviendo en él. Si estás interesado en hacerte voluntario en No Me Abandones y echarnos una mano, puedes leer toda la información aquí.